Recordando a Juan Pablo II y a José Salazar López.
Al cumplirse los 40 años de su visita a México.
Esculturas en bronce de Carlos Terrés en Guadalajara
Por: Jorge Fernando González
Las esculturas del Maestro Escultor Carlos Terrés instaladas en la Iglesia del Sagrario Metropolitano en pleno centro de la Ciudad de Guadalajara, ubicado en la avenida Alcalde a un costado de la Catedral Metropolitana, la parroquia más antigua de la Diócesis. “… Antes de existir la Catedral, fue la parroquia …”, refiere Mons. Ramiro Valdés Sánchez, quien fuera encargado del templo y Vicario General de la Arquidiócesis de Guadalajara, y quien hiciera el encargo de las obras al Maestro Carlos Terrés,estas esculturas nos recuerdan la primera vez que el Papa Juan Pablo II visito a México y fue recibido como anfitrión en Guadalajara por Don José Salazar López II Cardenal de Guadalajara, el 26 de enero de 1979, hace 40 años, nos recuerdan también las cuatro visitas posteriores, en donde el Papa logro el cariño de la gente y el establecimiento de las relaciones diplomáticas entre nuestro país y la Santa Sede.
La primer visita que estuvo enmarcada por no existir relaciones diplomáticas, el anticlericalismo, la falta de visas, el retardo del Presidente José López Portillo, quien debía recibir al Papa, como mandatario y fue recibido como visitante, mientras que millones de mexicanos inundaban las calles de la capital para festejar su llegada, donde asociaciones civiles y no policías cuidaban de este Papa cuyo gran carisma hizo el resto, con su personalidad, humildad, vocación Guadalupana, su amor por México y los Mexicanos.
Las esculturas de bronce de Juan Pablo II, modeladas por Terrés, representan al Papa polaco bendiciendo y a José Salazar López, II Cardenal de Guadalajara, sencillo, humilde,pequeño de estatura física, al lado del Papa, siguiendo sus huellas, como una de las grandes figuras del siglo XX, nacido en Ameca, el 12 de enero de 1910, Ordenado Sacerdote el 26 de mayo de 1934. Profesor y Maestro por 27 años, Obispo coadjutor de Zamora el 22 de mayo de 1961, Obispo residencial de Zamora, el 15 de septiembre de 1967 y Arzobispo de Guadalajara y II Cardenal, el 1º de marzo de 1970, en plena aplicación del Concilio Vaticano II, muriendo el 9 de julio de 1991.
Son estas obras en bronce del Escultor Carlos Terrés, un incremento en la riqueza del arte sacro en Guadalajara y una celebración de la memoria histórica de nuestro país.
Remembering Juan Pablo II and José Salazar López. On the 40th anniversary of his visit to Mexico. Bronze sculptures by Carlos Terrés in Guadalajara
By: Jorge Fernando González
The sculptures of the Master Sculptor Carlos Terrés installed in the Church of the Metropolitan Sagrario in the heart of the City of Guadalajara, located on the avenue Mayor next to the Metropolitan Cathedral, the oldest parish of the Diocese. «… Before the Cathedral existed, it was the parish …», says Mons. Ramiro Valdés Sánchez, who was in charge of the temple and Vicar General of the Archdiocese of Guadalajara, and who commissioned the works to Master Carlos Terrés, these sculptures They remind us of the first time that Pope John Paul II visited Mexico and was received as a host in Guadalajara by José Salazar López II, Cardinal of Guadalajara, on January 26, 1979, 40 years ago. They also remind us of the four subsequent visits, where the Pope achieved the affection of the people and the establishment of diplomatic relations between our country and the Holy See.
The first visit was framed by no diplomatic relations, anti-clericalism, lack of visas, the delay of President José López Portillo, who was to receive the Pope, as president and was received as a visitor, while millions of Mexicans flooded the streets from the capital to celebrate his arrival, where civil associations and non-policemen took care of this Pope whose great charisma did the rest, with his personality, humility, Guadalupana vocation, his love for Mexico and the Mexicans.
The bronze sculptures of John Paul II, modeled by Terrés, represent the Polish Pope blessing and José Salazar López, II Cardinal of Guadalajara, simple, humble, small of physical stature, next to the Pope, following in his footsteps, as one of the great figures of the twentieth century, born in Ameca, on January 12, 1910, ordained priest on May 26, 1934. Teacher and Teacher for 27 years, coadjutor Bishop of Zamora on May 22, 1961, residential Bishop of Zamora, September 15, 1967 and Archbishop of Guadalajara and II Cardinal, on March 1, 1970, in full application of the Second Vatican Council, dying on July 9, 1991.
These are the bronze works of the sculptor Carlos Terrés, an increase in the wealth of sacred art in Guadalajara and a celebration of the historical memory of our country.