“La Última Cena” de Terrés
Por Sebastián Hernández
La “cuarentena creativa” que coincide simbólicamente con la “cuaresma” que dura 40 días, comenzando el Miércoles de Ceniza y termina antes de la Cena del Señor del Jueves Santo, periodo en el que se encuentra al igual que la mayoría de las personas en esta contingencia del COVID-19 el Maestro Carlos Terrés, ha creado su más reciente obra “La última cena” (acrílico sobre tela, 3.00 x 1.50 mts.).
A base de lineas y colores a su muy peculiar estilo, en esta pintura se representa la escena de la comida mas trascendental de la historia.
Encargada por un coleccionista privado, “La última cena” se caracteriza por las lineas que unen a todos los personajes, unos con otros, formando un solo escenario enmarcado por sombras que hacen que destaque únicamente la imagen del centro que es Jesús acompañado por dos grupos de seis apóstoles a cada lado para equilibrar la composición de la obra.
Esta pintura menciona la tradición anual en que los hijos de Israel, celebraban la Pascua recordando cuando el ángel de Dios ‘recorrió’ cada casa en Egipto, matando al primogénito de los egipcios. En esta ocasión Jesús desea que sus apóstoles recuerden que él murió por ellos.
Los rostros de cada apóstol denotan los dos momentos decisivos de esta historia, el primero cuando les dice: “uno de ustedes me va a traicionar” (destaca a la izquierda Judas con su bolsa de monedas) y el segundo: la “transubstanciación”, la unión de lo terrenal con lo divino, “la institución de la Eucaristía”, las manos de Cristo simultáneamente portan el pan y el vino, su cuerpo y su sangre, ofreciéndose en sacrificio para la salvación del mundo, la imagen de Cristo esta representada como una pirámide, como un triangulo, para recordar a la Trinidad.
Así la luz y la sombra, el color y la linea, las miradas y los cuerpos casi abstractos de cada uno de los personajes de esta obra trabajan en sintonía para contar la historia, universalmente conocida e interpretada, “La última cena” de Terrés, es una obra de arte que fortalece la fé, celebra el sacrificio de la Eucaristía y la salvación, a travez de lineas y colores que unen lo natural con lo sobrenatural, bajo la mirada creativa de los ojos de un artista plástico.